viernes, 30 de mayo de 2008

INTRODUCCION

INTRODUCCIÓN

El saber acerca de los valores, que significan y cuales son estos, nos lleva a tener una mejor vida con más felicidad. La mayoría de las personas de las recientes generaciones no saben mucho acerca de los valores puesto que ha habido una gran crisis de valores entre nuestras jóvenes familias. Por eso es necesario que los jóvenes comprendan cual es el objetivo de los valores. Un valor no es algo definido completamente pero podemos decir que, un valor no es algo que se posee, pero que se aspira a tener, como un ideal, o como el centro de gravedad de la vida humana. La educación de los valores es importante puesto que los valores son la formación de las personas y ello incluye la transmisión de valores estéticos. Éticos y religiosos. Los valores son aprendidos durante la vida de una persona, aun así, los principales agentes para la transmisión de valores son los padres puesto que ellos son los que han decidido engendrar un ser humano y es su responsabilidad educarlo. Sin embargo ola escuela va a la par con la educación ya que en la escuela en la escuela se aprenden los valores sociales. Los valores que hay que tener presentes para la educación formal son los de la esfera humanista, como la prudencia, la justicia, la templanza, la mansedumbre, la comprensión, la compasión, el perdón y la fraternidad. Así como también los valores pragmáticos como son la eficacia, la rentabilidad, la eficiencia, la competencia y la laboriosidad. Estos valores son los que de alguna forma están en crisis en este momento aunque en realidad no se le puede llamar crisis a lo que esta pasando con los valores en este momento si no explosión de valores. Puesto que los estilos y formas de comprender la felicidad van cambiando conforme la sociedad v
Cambia. Los adultos tienen mayor dificultad para transmitir lo que para ellos son los valores a los jóvenes puesto que los valores van cambiando y también la prioridad de los jóvenes acerca de lo que es valioso para ellos. Por ejem0plo la escolaridad es una valor que se ha ido perdiendo puesto que los jóvenes de las recientes dos décadas tomaron la escuela como una obligación y la dejan cuando ya no tienen la obligación de tomarla, mostrando apatía y desinterés hacía su educación. En tiempos tan difíciles para transmitir valores nobles y valiosos se necesitan pretextos para buscar formas de transmitirlos puesto que los valores son lo más importante para la formación de un ser humano valioso para si mismo y para la sociedad.

OBJETIVO Y JUSTIFICACION

Objetivo

Investigar la crisis de valores que se esta presentando en el mundo actual, así como sus consecuencias tanto como en sociedad como a nivel individual, además como rescatar a las nuevas generaciones de la falta progresiva de valores que esta afectando cada vez más la convivencia del ser humano como sociedad.

Justificación

Se realizara la presente investigación con el propósito de saber más acerca de los valores, cuales son los valores, como funcionan y en que consiste, como se están perdiendo, para que así tanto nosotros como generaciones futuras tengan conciencia de que sin valores nuestra sociedad no funciona bien y que también lleguen a tener una cultura de valores no solamente en forma social, sino también una cultura de valores no solamente en forma social, sino también una cultura de valores en la naturaleza, que lamentablemente ya se ha ido perdiendo y que ha ido afectando nuestro entorno.

¿QUE SE ENTIENDE POR VALOR?

Los valores son características morales positivas que toda persona posee, tales como la humildad, la piedad y el respeto; así como todo lo referente al género humano. El concepto de valores se trató, principalmente, en la antigua Grecia como algo general y sin divisiones, pero la especialización de los estudios en general ha creado diferentes tipos de valores, y han relacionado estos con diferentes disciplinas y ciencias. Es una entidad intrínseca y social al mismo tiempo.
Se denomina tener valores al respetar a los demás; asimismo los valores son un conjunto de ejemplos que la sociedad establece para las personas en las relaciones sociales.
Su estudio corresponde a la Axiología, una rama de la Filosofía, y de una forma aplicada pueden ocuparse otras ciencias como la Sociología, la Economía y la Política, realizándolo de maneras muy diferenciadas.
Los valores no existen en una sociedad con problemas de comunicación.
Sus definiciones y contenidos han cambiado en el curso de la Historia. Los valores son creencias de mayor rango, tienen una expresión de consenso social, y es un componente de la cultura, que incluye asimismo a los agnósticos con los movimientos de antivalores o bien por su sustitución por otro grupo de valores
Estos son algunos de los valores morales:
Espíritu crítico
Defensa de los intereses de clase
Libertad
Honestidad
Valentía
Veracidad
Humildad
Amor
Paz
Respeto
Responsabilidad
Tolerancia Social
Unidad
Ayuda
Amistad
Caridad
Fidelidad
Lealtad
Igualdad Social
Colaboración
Generosidad
Solidaridad
Comprensión
Calidad
¿CUAL ES LA TEORIA DE LOS VALORES?En un artículo de esta naturaleza, el enfoque puede centrarse sobre los valores morales, como se hizo hasta aquí. Pero no debemos desconocer ni dejar de lado, que en los orígenes de la teoría del valor, hacia fines del siglo XIX, el espectro de valores particulares ha sido considerado mucho más amplio. En general, allí se estima que es valioso, lo que, hablando de manera redundante, "vale". En este sentido, vale lo religioso, lo estético o bello, lo vital, lo útil, y como ya se abundó anteriormente, lo bueno y lo justo. Para estos teóricos finiseculares, cuadra el distingo entre "ser" y "valer". Las cosas son, y la belleza- digamos- no es, sino que vale. Por tal motivo, lo ontológico, o relativo al ser, camina de modo paralelo a lo axiológico, o relativo al valor. Los valores tienen, como en torno de lo ético quedó apuntado, polaridad. Son entidades, si así puede denominarse para comprender, que frecuentan el antagonismo de los contrarios. Lo sagrado se contrapone a lo profano. Lo bello a lo feo. Lo sano a lo enfermo. Lo útil a lo inútil o deleznable. Lo justo a lo injusto. Lo bueno a lo malo. Así, esta polaridad tiene su aspecto positivo y la contrapartida negativa. Además, en este contexto se habla de "escala de valores". No es lo mismo optar por lo "útil", desechando lo "bello", que la conducta contraria. Pareciera que todos estamos como predispuestos a sentir -y esta palabra tiene implicancias importantes- que un cuadro de Leonardo vale más que un artefacto técnico de nuestra época. Que la ayuda a los inocentes vale más que la ayuda a los malvados en consideración a que ello me resulta "útil". Y así podríamos seguir. Ahora bien. Se acaba de enfatizar sobre la palabra "sentir", y ello se debe a que en los formadores de la teoría, se planteó el modo de "captar" los valores. La intuición de los mismos, según lo declarará ya en el siglo XX, Scheler, es emocional. No intelectiva. Así ocurre con la captación individual de un valor, y también acaece con la distinción en la magnitud cotejada de los valores, que terminará estratificándose en una escala. Para este último filósofo, sentimos los valores con intuición emocional objetiva, del valor y de la escala correspondiente. Esta posición se opondrá de manera tajante a los que ya en el principio de la teorización hablaron de la subjetiva y algo arbitraria constitución del valor y de la escala de valores. Esta última postura conlleva, lógica e inevitablemente, a un declarado relativismo. Una imposibilidad de emitir juicios críticos valederos, y de toda actitud crítica en general, en virtud de la carencia de toda fundamentación. Agreguemos que, curiosamente, mucho después de formulado el objetivismo scheleriano, los neopositivistas entendieron, amarrados a su teoría de la verificación empírica de los juicios, que los juicios de valor no se pueden "demostrar" por la experiencia, y que, por lo mismo, se quedan en mera "expresión" del sujeto. En movimiento "centrípeto" de la subjetividad. Hacia mediados del siglo XX, Sartre, retrotrayéndose a Nietzsche y a la "muerte de Dios" dirá, desde su ateísmo y reiterando de alguna manera al filósofo de Zaratustra, que si Dios no existe, todo vale lo mismo, haciendo igualmente estimable cualquier conducta ética. Lo que, implícitamente, ponía en la existencia de lo divino el fundamento de los valores de todo tipo, especialmente de los morales, y de toda escala de los mismos. Acotemos a este respecto que, el autor de "Los hermanos Karamázov" y de "Crimen y castigo", ya había manifestado sobre este mismo tópico que "si Dios no existe, todo esta permitido". Como acontece en filosofía, estas noticias un tanto dispersas lo único que intentan es plantear la complejidad del problema. Acaso porque en esta disciplina predominan las preguntas


EL VALOR DE LA LABORIOSIDAD


Alguna vez un cómico dijo "Tan terrible es el trabajo que hasta pagan por hacerlo", sin embargo el trabajo es un valor fundamental.Cuando alguien se refiere a nosotros por “ser muy trabajadores” nos sentimos distinguidos y halagados: los demás ven en nosotros la capacidad de estar horas y horas en la escuela, en la casa o en la oficina haciendo “muchas cosas importantes”. Efectivamente esa puede ser la razón, pero existe la posibilidad de carecer de un sistema de trabajo que nos lleva a “trabajar” más tiempo de lo previsto. Esto se identifica con claridad cuando iniciamos varias tareas y sólo terminamos algunas, generalmente las menos importantes (las que más nos gustan o se nos facilitan), además de ir acumulando labores que después se convertirán en urgentes. La laboriosidad significa hacer con cuidado y esmero las tareas, labores y deberes que son propios de nuestras circunstancias. El estudiante va a la escuela, el ama de casa se preocupa por los miles de detalles que implican que un hogar sea acogedor, los profesionistas dirigen su actividad a los servicios que prestan. Pero laboriosidad no significa únicamente "cumplir" nuestro trabajo. También implica el ayudar a quienes nos rodean en el trabajo, la escuela, e incluso durante nuestro tiempo de descanso; los padres velan por el bienestar de toda la familia y el cuidado material de sus bienes; los hijos además del estudio proporcionan ayuda en los quehaceres domésticos.Podemos, fácilmente, dar una apariencia de laboriosidad cuando adquirimos demasiadas obligaciones para quedar bien, aún sabiendo que no podremos cumplir oportunamente; también puede tomarse como pretexto el pasar demasiado tiempo en la oficina o la escuela para dejar de hacer otras cosas, como evitar llegar temprano a casa y así no ayudar a la esposa o a los padres.Al crear una imagen de mucha actividad pero con pocos resultados se le llama activismo, popularmente expresado con un “mucho ruido y pocas nueces”. Es entonces cuando se hace necesario analizar con valentía los verdaderos motivos por los que actuamos, para no engañarnos, ni pretender engañar a los demás cubriendo nuestra falta de responsabilidad.La pereza es la manera común de entender la falta de laboriosidad; las máquinas cuando no se usan pueden quedar inservibles o funcionar de manera inadecuada, de igual forma sucede con las personas: quien con el pretexto de descansar de su intensa actividad -cualquier día y a cualquier hora- pasa demasiado tiempo en el sofá o en la cama viendo televisión “hasta que el cuerpo reclame movimiento”, poco a poco perderá su capacidad de esfuerzo hasta ser incapaz de permanecer mucho tiempo trabajando o estudiando en lo que no le gusta o no le llama la atención.Para ser laborioso se necesita estar activo, hacer cosas que traigan un beneficio a nuestra persona, o mejor aún, a quienes nos rodean: dedicar tiempo a buena lectura, pintar, hacer pequeños arreglos en casa, ayudar a los hijos con sus deberes, ofrecerse a cortar el pasto... No hace falta pensar en grandes trabajos “extras”, sobre todo para los fines de semana, pues el descanso es necesario para reponer fuerzas y trabajar más y mejor. El descanso no significa “no hacer nada”, sino dedicarse a actividades que requieren menor esfuerzo y diferentes a las que usualmente realizamos.Podemos establecer pequeñas acciones que poco a poco y con constancia, nos ayudarán a trabajar mejor y a cultivar el valor de la laboriosidad:- Comenzar y terminar de trabajar en las horas previstas. Generalmente cuesta mucho trabajo, pero nos garantiza orden para poder cubrir más actividades.- Establecer un horario y una agenda de actividades para casa, en donde se contempla el estudio, el descanso, el tiempo para cultivar las aficiones, el tiempo familiar y el de cumplir las obligaciones domésticas o encargos.- Terminar en orden y de acuerdo a su importancia todo lo empezado: encargos, trabajos, reparaciones, etc.- Cumplir con todos nuestros deberes, aunque no nos gusten o impliquen un poco más de esfuerzo.- Tener ordenado y dispuesto nuestro material y equipo de trabajo antes de iniciar cualquier actividad. Evitando así poner pretextos para buscar lo necesario y la consabida pérdida de tiempo e interés.- Esmerarnos por presentar nuestro trabajo limpio y ordenado.Cuando nos decidimos a vivir el valor de la laboriosidad adquirimos la capacidad de esfuerzo, tan necesaria en estos tiempos para contrarrestar la idea ficticia de que la felicidad sólo es posible alcanzarla por el placer y comodidad, logrando trabajar mejor poniendo empeño en todo lo que se haga.




"MAS SE ESTIMA LO QUE CON

MAS TRABAJO SE GANA"

Aristoteles



ACEPCION FILOSOFICA

La teoría de los valores se ha constituido en un nuevo territorio del marco de la filosofía.


Aproximadamente siglo y medio el antiguo estudio de los valores son concebidos inicialmente por el alemán Hertman Lotze el tal vez fue el primero en realizar el estudio de los valores, concebidos como una región distinta del ser y de la realidad natural, así como también destacó Francisco Brentano, fundador de la fenomenología se inspiró en gran parte en los trabajos que sobre este método filosófico influyó Brentano, ambos establecen en un solo punto el antiguo estudio de los valores que antes fueron estudiados por filósofos como Platón, Sócrates, Aristóteles, entre otros en donde se puede localizar hoy en día estudios sobre los valores como es la bondad, la belleza, la justicia, la libertad, la santidad, e inclusive el saber, sin embargo este pensamiento era disperso y no se lograba englobar ese tratado sistemático de lo digno o valioso ,los filósofos anteriormente mencionados afirmaron que el valor no pertenece exactamente a la realidad física, ideal, psicológica, social o histórica, si no que pertenece a otro tipo de realidad, ya que el valor no necesariamente tiene cabida absoluta en alguna de las anteriores realidades.


Entonces el valor no está en las cosas u objetos en los que descansan, pero tendríamos que afirmar que los valores estén ahí, podemos aplicar ese mismo principio a muchos objetos que nosotros consideremos valiosos.


El valor trasciende desde los mismos objetos al ser y seguir permaneciendo a pesar del tiempo. Pero aunque el valor perece llevar una existencia parasitaria, es totalmente lo contrario ya que tiene una vida propia y objetiva, ya sea que caiga en un sujeto u objeto.


Aun con todo lo anterior no quiere decir que el valor por ya serlo sea jerarquizado o ser sujeto de la valoración a partir de ciertos niveles, pero debe de quedar claro que en dicha valoración debemos aplicar criterios para que nuestro juicio sea objetivo y nuestra escala de valoración adquiera una validez fundamentada, si esto no sucede es posible que la esta actitud lleve una gran carga de ignorancia, ósea una enorme subjetividad, por lo tanto hay que establecer criterios objetivos en nuestro análisis y nos lleva a pensar en una problemática especifica de valor.
La cual tiene como elementos principales su esencia, su conocimiento, su existencia, su jerarquía y su polaridad.

Si viéramos al valor con una visión histórica se diría que solo cobra sentido si se conjunta con las realidades físicas, ideales, psicológicas y sociales, pues así se podrá dimensionar, por que aunque el valor no lo poseen los objetos, lo cierto es que ahí descansa el valor.


Entonces se podría decir que el valor se comporta en cierta medida como adjetivos de los sujetos, pero está definición no menosprecia al valor ni supeditarlo a una vida parasitaria que sólo tiene cabida en función de la apreciación del sujeto, sólo pretende diferenciar al valor del objeto valioso,, también el valor tiene un sentido ideal o universal, aunque cada una establezca sus propios criterios de valoración, paro es por el hombre y los criterios de valoración, pero es por el hombre y los criterios sociales que estos se adquieren ese estatus de valor.


EL VALOR DEL RESPETO



El respeto, como valor que faculta al ser humano para el reconocimiento, aprecio y valoración de las cualidades de los demás y sus derechos, ya sea por su conocimiento, experiencia o valor como personas, es el reconocimiento del valor propio y los derechos

de los individuos y de la sociedad. Éstos deben ser reconocidos como el foco central para lograr que las personas se comprometan con un propósito más elevado en la vida.
Sin embargo, el respeto no es sólo hacia las leyes o la actuación de las personas. También tiene que ver con la autoridad como sucede con los hijos y sus padres o los alumnos con sus maestros.
El respeto ayuda a mantener una sana convivencia con las demás personas, se basa en normas de diferentes sociedades e instituciones.
El respeto como valor, cumple un papel muy importante en nuestras vidas.
Hay una frase muy conocida que dice: "No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti". Respeto es reconocer en sí y en los demás sus derechos y obligaciones con dignidad dando a cada quien su valor.

Hablar de respeto es hablar de los demás. Es establecer hasta donde llegan mis posibilidades de hacer o no hacer, y dónde comienzan las posibilidades de los demás. El respeto es la base de toda convivencia en sociedad. Las leyes y reglamentos establecen las reglas básicas de lo que debemos respetar.

Sin embargo, el respeto no es solo hacia las leyes o la actuación de las personas. También tiene que ver con la autoridad como sucede con los hijos y sus padres o los alumnos con sus maestros. El respeto también es una forma de reconocimiento, de aprecio y de valoración de las cualidades de los demás, ya sea por su conocimiento, experiencia o valor como personas.

El respeto también tiene que ver con las creencias religiosas. Ya sea porque en nuestro hogar tuvimos una determinada formación, o porque a lo largo de la vida nos hemos ido formando una convicción, todos tenemos una posición respecto de la religión y de la espiritualidad. Es tan íntima la convicción religiosa, que es una de las fuentes de problemas más comunes en la historia de la humanidad.

Aquí viene, entonces, también el concepto de Pluralidad, es decir, de las diferencias de ideas y posturas respecto de algún tema, o de la vida misma. La pluralidad enriquece en la medida en la que hay más elementos para formar una cultura. La pluralidad cultural nos permite adoptar costumbres y tradiciones de otros pueblos, y hacerlos nuestros. Sin embargo cuando la pluralidad entra en el terreno de las convicciones políticas, sociales y religiosas las cosas se ponen difíciles.

Así es como llegamos al concepto de intolerancia, es decir el no tolerar. Fácilmente, ante alguien que no piensa, no actúa, no vive o no cree como nosotros podemos adoptar una actitud agresiva. Esta actitud, cuando es tomada en contra de nuestras ideas se percibe como un atropello a uno de nuestros valores fundamentales: la libertad. La intolerancia puede ser tan opresiva, que haga prácticamente imposible la convivencia humana. ¿Y nuestra propia tolerancia? ¿Debemos convencer a alguien que no es católico de que no está en la verdad? ¿No es acaso eso ser "intolerante"?

Para dar respuesta a estas interrogantes, y tocar el tema del respeto, la pluralidad y la tolerancia con más profundidad, hemos hecho una selección del mejor material sobre el tema desde los puntos de vista pedagógicos, éticos y religiosos. Los artículos que presentamos en este segmento de valores nos hace reflexionar en qué es el respeto, cómo se enseña y por qué es importante enseñarlo a los hijos, el por qué de la intolerancia y de particular interés es la sección "Iglesia y Valores", que nos habla de nuestra propia tolerancia respecto de otras religiones y creencias y de la importancia de la pluralidad y el respeto.


"NADIE ES LO SUFICIENTE

PEQUEÑO O POBRE PARA

SER IGNORADO"

Henry Miller


ACEPCION PEDAGOGICA

Los valores son producto de cambios y transformaciones a lo largo de la historia. Surgen con un especial significado y cambian o desaparecen en las distintas épocas.
En sentido humanista, se entiende por valor lo que hace que un
hombre sea tal, sin lo cual perdería la humanidad o parte de ella. El valor se refiere a una excelencia o a una perfección. Desde un punto de vista socio-educativo, los valores son considerados referentes, pautas o abstracciones que orientan el comportamiento humano hacia la transformación social y la realización de la persona. Son guías que dan determinada orientación a la conducta y a la vida de cada individuo y de cada grupo social.
¿Qué hace que algo sea valioso? La humanidad ha adoptado criterios a partir de los cuales se establece la categoría o la jerarquía de los valores. Algunos de esos criterios son: (a) Durabilidad: los valores se reflejan en el curso de la vida. Hay valores que son más permanentes en el
tiempo que otros. Por ejemplo, el valor del placer es más fugaz que el de la verdad. (b) Integralidad: cada valor es una abstracción íntegra en sí mismo, no es divisible. (c) Flexibilidad: los valores cambian con las necesidades y experiencias de las personas. (d) Satisfacción: los valores generan satisfacción en las personas que los practican. (e) Polaridad: todo valor se presenta en sentido positivo y negativo; Todo valor conlleva un contravalor. (f) Jerarquía: Hay valores que son considerados superiores (dignidad, libertad) y otros como inferiores (los relacionados con las necesidades básicas o vitales). Las jerarquías de valores no son rígidas ni predeterminadas; se van construyendo progresivamente a lo largo de la vida de cada persona. (g) Trascendencia: Los valores trascienden el plano concreto; dan sentido y significado a la vida humana y a la sociedad. (h) Dinamismo: Los valores se transforman con las épocas. (i) Aplicabilidad: Los valores se aplican en las diversas situaciones de la vida; entrañan acciones prácticas que reflejan los principios valorativos de la persona. (j) Complejidad: Los valores obedecen a causas diversas, requieren complicados juicios y decisiones.
La clasificación de los valores son:(a) valores de lo agradable y lo desagradable, (b) valores vitales, (c) valores espirituales: lo bello y lo feo, lo justo y lo injusto, valores del
conocimiento puro de la verdad, y (d) valores religiosos: lo santo y lo profano. La clasificación más común discrimina valores lógicos, éticos y estéticos. También han sido agrupados en: objetivos y subjetivos (Frondizi, 1972); o en valores inferiores (económicos y afectivos), intermedios (intelectuales y estéticos) y superiores (morales y espirituales). Rokeach (1973) formuló valores instrumentales o relacionados con modos de conducta (valores morales) y valores terminales o referidos a estados deseables de existencia (paz, libertad, felicidad, bien común). La clasificación detallada que ofrece Marín Ibáñez (1976) diferencia seis grupos: (a) Valores técnicos, económicos y utilitarios; (b) Valores vitales (educación física, educación para la salud); (c) Valores estéticos (literarios, musicales, pictóricos); (d) Valores intelectuales (humanísticos, científicos, técnicos); (e) Valores morales (individuales y sociales); y (f) Valores trascendentales (cosmovisión, filosofía, religión)


EL VALOR DE LA HONESTIDAD


Es la cualidad humana que puede distinguir de lo bueno a lo malo; esto quiere decir que sabe distinguir la verdad y la autentica justicia.
La honestidad expresa respeto hacia uno mismo y hacia los demás.
La honestidad no consiste sólo en franqueza (capacidad de decir la verdad) sino en asumir que la verdad es sólo una y que no depende de personas o consensos sino de lo que el mundo real nos presenta como innegable e imprescindible de reconocer.

Honestidad es hablar de lo que se piensa y hacer lo que se ha dicho. No hay contradicciones ni discrepancias entre los pensamientos, palabras o acciones. Esta integración proporciona claridad y ejemplo a los demás. Ser interiormente de una forma y exteriormente de otra, crea barreras y puede causar daño, porque nunca podremos estar cerca de los demás ni los demás querrán estar cerca nuestro. Algunos piensan: “Soy honesto, pero nadie me comprende”. Esto no es ser honesto. La honestidad es tan claramente perceptible como un diamante sin defectos que nunca puede permanecer escondido. Su valor es visible en cada acción que realizamos.


" ESPERO TENER SUFICIENTE FIRMEZA

PARA CONSERVAR LO QUE CONSIDERO

EL MAS ENVIDIABLE

DE TODOS LOS TITULOS: ´EL

CARACTER DEL HOMBRE HONESTO´"

George Washington


ACEPCION PSICOLOGICA

Para que se pueda hablar de justicia es necesario que este valor se presente en relación con otra u otras personas, no con uno mismo. Veamos el siguiente ejemplo: Juan y Marcelo realizaron el mismo trabajo y perciben el mismo salario, pero Juan descansa solamente un día a la semana y Marcelo dos. Lo justo sería que ambos descansaran el mismo periodo; sin embargo, Juan descansa un día menos que Marcelo y esa situación resulta injusta. Como seguramente te habrás advertido, para que pudiéramos decir que en el ejemplo existe una situación injusta el valor justicia tuvo que referirse a la situación que guardan las dos persona entre si y no cada uno de manera separada.
“justicia es dar a cada cual lo suyo”. Esta es la noción clásica, del pensador romano Ulpiano, que contempla a la justicia como una virtud moral cuyo propósito esencial es el perfeccionamiento del individuo. Desde esta óptica la justicia se aplica de igual manera a todos los que se encuentran en una misma condición, sin hacer ninguna distinción.
“justicia es tratar igual a los iguales y desigual a los desiguales”. Esta regla se aplica generalmente cuando se tiene que pagar impuestos. Por ejemplo, Luís y Ángela ganaron 50 000, durante el año, es decir, sus ingresos fueron iguales, están en la misma condición, a ambos se les debe cobrar el mismo impuesto. Se trata de igual a los iguales. En cambio, si Felipe obtuvo 10 000, durante el mismo año se le debe cobrar un impuesto menor, puesto que su coedición es diferente; se trata desigual a los desiguales.

¿Existen valores universales que sean validos para toda la humanidad, que sean capaces de inspirar la vida, con independencia de las diferentes culturas, religiosas, geográficas o económicas de cada ser?
He aquí una de las cuestiones éticas mas intensamente debatidas en este siglo que finaliza, donde la línea del pensamiento llamada postmodernidad ha relativizado la validez o invalides de las conductas, reduciendo las diferencias a simples puntos de vista o lenguajes diferentes entre personas y poblaciones.
Sin embargo, el todo vale, o el todo es relativo, rosa en el terreno del absurdo cuando se elevan a algo más que un mero discurso pseudo filosófico.
Entonces se observa que, a pesar de las diferencias la humanidad esta realmente dotada de ciertos valores que son universales y que funciona mas allá de las fronteras.
La dificultad estriba en que para madurar se necesita un dialogo y la superación del estadio infantil, basado en el principio de la autoridad paterna, mediante la autonomía.
Pero también es imprescindible la integración de la persona en la sociedad. El reconocimiento de los valores personales adquiridos son los adecuados solo pueden obtenerse a través de los demás, mediante la respuesta que de ellos se obtiene, es decir, en el fondo, mediante la adecuación a ciertos códigos éticos elegidos.
Las principales clases de justicia son: justicia legal, justicia conmutativa, justicia social y la justicia distributiva.


EL VALOR DE LA JUSTICIA


Justicia, constante y perpetua voluntad de dar a cada uno lo que le corresponde. Esta idea tan genérica cobra expresión en dos tipos de justicia reconocidos: la conmutativa, trasunto del principio de reciprocidad, que exige dar en contraprestación otro tanto de aquello que se ha recibido como prestación de forma proporcional, y la distributiva, concepto más amplio, que hace referencia a la solidaridad con los más débiles de la sociedad, a cuyo fin se procurará una cierta redistribución de cargas y ventajas de acuerdo a sus necesidades con el objeto de paliar y suprimir las desigualdades que son independientes de los méritos y el esfuerzo personal o su contribución social.
Estas ideas adquieren expresión concreta en el Derecho positivo, primero a través de las constituciones que reconocen el valor de la justicia como fundamental del ordenamiento jurídico, junto a la libertad, la igualdad y el pluralismo político. Se señala este orden ya que los tres últimos valores indicados son expresiones manifiestas de la justicia.
Sin embargo, no es posible el disfrute de tales valores sin la provisión de los medios necesarios para el pleno desarrollo de la personalidad individual, familiar y social. A tal fin, suelen las constituciones reconocer de forma ordinaria la propiedad y con ella otros derechos reales limitados, siempre que respondan a una función social, entendida como feliz combinación de los intereses individuales y colectivos, de forma que en un justo equilibrio, pueda generarse una progresiva evolución de la calidad de vida, traducible en un derecho al trabajo, a una vivienda digna, al disfrute del medio ambiente, a la cultura y la educación entre otros.

1. La justicia es una característica posible pero no necesaria del orden social. Para que haya orden social no es imprescindible la justicia.
Un hombre será considerado justo para el orden social cuando sus actos concuerden con el orden social que se haya considerado justo.
El orden social será considerado justo cuando regle la conducta de los hombres de modo que todos queden satisfechos y logren la felicidad.
1. El orden social justo tampoco será posible si se entiende que deberá lograr la mayor felicidad posible del mayor número posible de miembros de la sociedad, porque lo que haga felices a algunos en determinados aspectos, producirá infelices en aspectos distintos y viceversa. (Jeremias Bentham)
Se debe entender por felicidad en sociedad la satisfacción de ciertas necesidades tenidas en cuenta por la autoridad social. Esta definición de felicidad difiere totalmente con el sentido del término felicidad, el cual es profundo y subjetivo.
4. La justicia individual y subjetiva al convertirse en una satisfacción de necesidades socialmente aceptadas sufre una transformación similar a la de la libertad individual para llegar a ser una libertad en sentido social.
Un orden social será justo cuando garantice la libertad individual.
La idea de justicia se transforma de un principio que garantiza la libertad individual de todos en un orden social que protege determinados intereses considerados escenciales por la mayoría de los miembros de la sociedad.
2. El problema se produce cuando aparecen intereses en conflicto, debido a diferentes escalas de valores que manejan los miembros de una sociedad; aquí es cuando actúa la justicia.

2. Ejemplos de diferentes escalas de valores.
1. Para algunos hombres la vida es el valor supremo; para otros no. Un ejemplo de esto tenemos al encontrar opiniones contrarias sobre la pena de muerte o el servicio militar."Resulta imposible decidirse de manera científico racional por cualquiera de estos juicios de valor; la resolución estará a cargo de nuestra conciencia, de lo emocional".2. Para un esclavo no será tan simple decidir si vale más la vida o la libertad.3. Para algunas personas será preferible un sistema económico libre y para otros una economía planificada; esto tendrá que ver según el valor libertad individual o el valor seguridad económica de cada uno.4. ¿Tiene el médico que decirle la verdad al enfermo terminal o debe mentirle por compasión?. Esto se resolverá de acuerdo al valor que la persona le atribuya a la verdad y a la compasión.5. Según Platón, en ciertos casos, el justo puede ser infeliz y el injusto feliz. Sin embargo cree que es preciso que los ciudadanos sometidos a la ley
piensen que sólo es feliz el justo. Por esto Platón justifica el mentir del estado cuando garantiza la obediencia de la ley y acepta que para el gobierno la justicia, o sea lo legal, se encuentre por encima de la verdad.6. "La respuesta tendrá siempre un juicio subjetivo".


Justicia absoluta. Principio de relevancia. Democracia.
1. Racionalmente no puede encontrarse una norma de conducta que tenga validez absoluta.
La justicia absoluta configura una perfección suprema irracional.
La diversidad de intereses humanos tarde o temprano provocan conflictos de intereses, para lo cual se plantean dos soluciones posibles: a) satisfacer a uno a costa del otro; b) equilibrio entre ambos.
Si se entiende valor supremo por la paz social, el equilibrio será la solución justa.
2. El principio de la tolerancia va a ser el que permita que la teoría relativista de los valores subsista.
3. La democracia es la forma de gobierno más favorecedora de la ciencia
Definición de Kelsen sobre la justicia:
"La justicia es para mí aquello bajo cuya protección puede florecer la ciencia, y junto con la ciencia, la verdad y la sinceridad. Es la justicia de la libertad, la justicia de la paz, la justicia de la democracia, la justicia de la tolerancia".
Conclusión personal
Creo conveniente antes que nada diferenciar algunos conceptos para intentar luego realizar un análisis sobre la justicia entendida desde el enfoque social.
Kelsen, en el primer capítulo de su obra, hace mención a dos tipos diferentes de justicia: una justicia individual por un lado y una justicia social por otro.
A mi entender sería en vano tratar de analizar la justicia individual, ya que no responde a la realidad vivida hoy en día. Al decir "realidad" me estoy refiriendo a un mundo en el cual los hombres conviven de acuerdo a un orden establecido por ellos mismos, un ORDEN SOCIAL, y como tal, la justicia que tiene valor en dicho orden será de caracter social.
Con esto no estoy renegando de la existencia de la justicia absoluta, a mi parecer fundamental, sino que entiendo que tanto la justicia individual como la social conllevan a ésta; ya que todos los hombres se ven impulsados a justificar su conducta con un valor absoluto.
Según mi opinión, esos valores absolutos o supremos que llevan a la justicia absoluta son inaccesibles a nuestro conocimiento. La justicia absoluta para mí es una justicia basada en la religión, en la que la autoridad se ve reflejada en un ser supremo: Dios.
A mi entender, un orden social será justo cuando todos y cada uno de los miembros regidos por dicho orden sean acreedores de lo que merecen. Pero también creo que, debido a diversos factores, este principio no deja de ser una ilusión utópica. Es por esto que creo inapropiado hablar de un "orden social justo", y creo conveniente que los principios se preocupen por lograr un orden social lo más justo posible, que pienso yo, se irá logrando a medida que en la conciencia de los hombres se acreciente la idea de que el que obra de buena fe en algún momento será beneficiado.


" HAZ LO QUE SEA JUSTO.

LO DEMAS VENDRÁ POR

SI SOLO"

Johanm Wolfgang

Von Goethe


¿CUALES SON LOS VALORES ETICOS?

Los valores éticos son aquellos pensamientos positivos que empleamos día con día para ser mejores personas en todos los ámbitos como son lo social, familiar, político, religioso, etc.
La característica de estos valores es que se emplean hacia las demás personas como son la confianza, la gratitud o el amor.
A continuación se les explica unos ejemplos de valores éticos que la mayoría de las personas emplean diariamente en cualquier lugar.
LOS VALORES ETICOS
LA CONFIANZA

La confianza es uno de los valores más importantes que el ser humano debe emplear en toda ocasión. Se trata básicamente de creer en si mismo para después creer en los demás. Existen diversas formas de dar confianza. La principal es la que nos permite sentirnos tan cerca de una persona, que podemos tratarla con familiaridad y contarle nuestras mas intimas emociones. La seguridad es también una importante manifestación de la confianza. Por ejemplo, un niño confía en que su madre lo protege y que, mientras este a su lado, no tiene nada que temer. Algunas de las otras actitudes que identifican a un hombre confiable es que cumple con sus obligaciones y tareas en todos los lugares.
"LA CONFIANZA EN SI MISMO
ES EL PRIMER SECRETO DEL
EXITO"
Ralph W. Emerson
LA GRATITUD

La gratitud es un valor que debes practicar a diario, ya que se trata de agradecer y corresponder a los que otros hacen por ti, como tus padres y los defensores de tus derechos.
Ser agradecidos significa algo más que decir “gracias”. Significa demostrar ese agradecimiento con acciones, por ejemplo: siendo buenos mexicanos, esto es cumpliendo con los deberes que impone nuestra constitución, haciendo nuestra tareas de la mejor forma posible, tratando siempre de superarnos, apoyándonos unos a otros, cuidando que haiga justicia entre unos a otros.

"EL AGRADECIMIENTO
ES LA MEMORIA
DEL CORAZÓN"
Lao Tsé


EL AMOR

El amor es un sentimiento de cariño que se tiene a otra persona u objeto. Este cariño puede ser de diferentes formas como son las siguientes:
Romántico, pasional, familiar, fraternal, a la naturaleza, a la humanidad, amor al prójimo o amor sexual. El amor en la actualidad es uno de los valores éticos mas importantes ya que si no se tiene amor especialmente a si mismo y a la vida nunca llegaremos a querer a los demás.
"EL AMOR ES LA PRIMERA PALABRA
DE DIOS. ES EL PRIMER PENSAMIENTO
QUE CRUZÓ POR SU MENTE"
Knut Hamsum